Lydia, muchísimas gracias, no me lo pude ni creer, estoy llorando de la emoción. Te hemos intentado llamar pero no hemos podido contactar contigo. Me imagino que hoy estarás muy liada. Te seguiremos llamando para preguntarte qué es lo que tenemos que hacer.
Otra vez muchas gracias y un abrazo. Es uno de los días más felices de mi vida, a pesar de estar con fiebre por amigdalitis, esto me va venir mejor que los antibióticos.
Besos,
Laura M., Vitoria, admitida en la universidad de Szeged (27.08.2010)
Deja tu comentario